Manga Winged

El Principio del Fin - Capitulo 24

domingo, 24 de febrero de 2013 , 2 Comentarios

Aquí os trigo la continuación, me ha llevado mi tiempo... pero conseguí terminarla. No tengo mucho más que decir así que antes de que alguien trate de matarme me voy haciendo la croqueta~

Capítulo 24: Una auténtica molestia.

Ya han pasado varios días desde que Naomi comenzó su castigo de ayudante de Doflamingo. Las palabras que le dijo el primer día aún siguen muy presentes en su mente. La costó, pero al final evito a Trafalgar todo lo que puedo y hasta la fecha sigue evitándolo. No se siente orgullosa de lo que está haciendo, nunca se había sentido tan mal. No es que se hablasen muy a menudo, pero ahora se siente bastante sola.

-¡Naomi, reacciona! – exclamo Shide sacándola de sus pensamientos.

-¿Qué pasa? – pregunto volviendo en sí.

-Últimamente estas en las nubes, ¿se puede saber qué te pasa?

-Nada, simplemente estaba pensando en cosas innecesarias…- El tono de Naomi era triste a la vez que monótono.

-¿Sigues dándole vueltas a lo de Trafi? – le pregunto Shide sentándose a su lado, aquello iba para largo.

-…

-Sigo pensando que deberías pasar de las idioteces de Doflamingo e ir a hablar con Trafi, así solo vas a salir perdiendo – dijo Shide suspirando. Cuando su amiga le había contado lo sucedido con su castigo no se lo había creído. Pero Naomi insistió tanto en que era mejor olvidarse del plan de los celos que prefirió que hiciese lo que quisiera.

-No estoy tan segura de que sea una idiotez…

-Lo que tú digas, nos vemos mañana en clase. Y piénsate mejor las cosas.

Dicho esto Shide se levantó del banco del parque en el que estaban sentadas y se fue por la calle bañada en un color cobre del otoño.

Naomi suspiro y también se levantó. Esa tarde habían quedado para dar una vuelta, pero ella sigue dándole vueltas a lo que está pasando ahora mismo con Trafalgar. Sería muy egoísta por su parte ir corriendo ahora junto a él como si no hubiese pasado nada y más sabiendo que es una molestia para él. Lo que Doflamingo dice no es ninguna tontería, le ha estado causando muchos problemas a Trafalgar. Lo mejor es que se olvide de él, tampoco es que pudiese pasar nada entre ellos.

Notando el ligero crujir de las hojas de otoño bajo sus pies, Naomi continuo su camino hasta casa. Ahora que lo pensaba también debía de ser una molestia para Shide. Solo ella sabe que le gusta su profesor, y por si eso no fuese poco siempre trata de ayudarla a conseguir algo con él, pero Naomi no ha hecho más que estropearlo y aun por encima va a quejarse a su amiga, le debe mucho a Shide, siempre tiene que aguantar sus quejas y estúpidas depresiones, sin duda es una auténtica molestia.

Después de lo que había hablado con Shide el día anterior, Naomi no tenía ganas de encontrarse con Trafalgar. Ya no sabía cuánto tiempo más podría seguir evitándolo. Llevaba desde el lunes pasado esquivándolo y para ella era como si hubiesen pasado semanas. El fin de semana pudo relajarse un poco y el lunes no tuvo clase con él, pero ahora que era martes no sabía cómo enfrentarse a su profesor. Era un comportamiento muy infantil por su parte.

Ya estaba llegando al instituto cuando vio la moto de Kid aparcada. Algunas veces el pelirrojo iba por las mañana hasta el instituto para acompañar a Law, pero no era algo muy habitual.

Naomi miro alrededor para ver si encontraba al dueño de la moto, pero no parecía estar por allí.

-Mejor, no tengo muchas ganas de hablar con nadie hoy – murmuro, continuando su paso hacia el instituto. Desde aquel lunes Naomi había estado evitando a Trafalgar, aunque también había tratado de tener el mínimo contacto con Kid.

- ¿No tienes ganas de hablar con nadie? – pregunto Kid, el cual acababa de aparecer para sorpresa de Naomi. El pelirrojo mostraba una expresión indiferente.

-Pues sí, hoy solo tengo ganas de estar sola – contesto Naomi una vez recuperada del susto.

-Eso cuéntaselo a quien le importe, ¿a qué viene esta actitud de repente? – le pregunto Kid.

-Simplemente me di cuenta de que es mejor que no me junte con vosotros – dijo Naomi dándole la espalda.

-Pues te has dado cuenta de eso tarde – dijo Kid en tono seco.- Los otros días parecía que te preocupabas por mi trabajo, no debería tomarme la molestia pero te diré que me va bastante bien.

Naomi se quedó con la vista clavada en el suelo, sin ver ningún punto fijo, escuchando como Kid se marchaba.

Una extraña sensación parecía extenderse por todo su cuerpo, algo como la impotencia y la culpa, una sensación desagradable que le daba a entender que lo que estaba haciendo quizás no era tan bueno como ella quería ver.

La mañana ya había empezado mal y las clases no fueron mejores. Shide parecía algo molesta con Naomi y en clase de Lengua habían tenido examen sorpresa.

Ya era el primer recreo y la hora de la clase de biología estaba más cerca.

-Naomi – la llamaron en cuanto salió al pasillo. Sabiendo perfectamente de quien se trataba se giró para encontrarse con Sharkiss. Para evitar que Naomi se saltase el castigo todos los recreos Sharkiss, y a veces Bellamy se encargaban de ir a buscarla.

-Buenos días, enana. Doflamingo te espera – dijo pasándole un brazo por los hombros.

Sin decir una palabra, Naomi dejo que la guiase por los pasillos hasta la clase del profesor de latín. Allí la esperaba sentado sobre su mesa.

-Hola, Naomi. ¿Te apetece un bombón? – le ofreció con una sonrisilla.

-No, gracias – rechazo la oferta.

-Entonces ya puedes ponerte a trabajar – dijo Doflamingo señalándole una pila de papeles mientras se llevaba un bombón a la boca.

Naomi se pasó el recreo ordenando papeles mientras Sharkiss y Bellamy rondaban por la sala. Parecía que disfrutaban pasándose los recreos allí mientras molestaban a Naomi cuando les apetecía.

Cansada de todo aquello, en cuanto acabó el recreo se fue a los jardines traseros del instituto. No le gustaba saltarse las clases, pero aquel día se le estaba haciendo completamente insoportable, además de que tenía clase con Trafalgar, tarde o temprano tendría que encontrarse con él, no podía saltarse sus clases eternamente, pero mejor tarde.

El Sol rociaba el extenso jardín ofreciéndole a Naomi tumbarse a descansar. Estaban en pleno otoño pero ese día hacia un sol agradable, uno de los días que más le gustaban. Cielo despejado con sol y un ambiente frío. El suelo estaba mullido y cómodo. Relajándose en aquel momento de tranquilidad, Naomi puso su mochila a modo de almohada y cerró los ojos esperando que cuando los volviese a abrir fuese un día mejor y que todo lo que había ocurrido fuese un absurdo sueño.

-Absurda es mi imaginación… - susurro dedicándole una sonrisa cansada al cielo.

-¿Ne te da vergüenza saltarte las clases para echarte una siesta al sol?

Despacio, Naomi, comenzó a abrir los ojos. Alguien le tapaba el sol y… ¿le había dicho algo? Se había quedado dormida sin poder evitarlo.

-¿Qué? – dijo frotándose los ojos a la vez que se sentaba.

-Por fin puedo hablar contigo – dijo la otra persona sentándose a su lado, entonces Naomi pudo comprobar quien era.

-¡¿Law?! – exclamo levantándose, pero el moreno la agarro por el brazo haciéndole sentarse otra vez.

-¿Por qué escapas? – le pregunto sin soltarle el brazo.

Naomi se quedó mirándolo sin decir nada. No sabía que decir y tampoco quería decir nada.

-¿Paso algo con Doflamingo? – le pregunto Trafalgar. Naomi se mantuvo callada mirando como la hierba se movía a la par del viento.

-No, no me dijo nada - mintió – Simplemente me di cuenta de que debo ser una molestia para ti.

Trafalgar se quedó mirándola, como si esperase a que dijese algo más. Entonces la soltó.

-Sí, eres una molestia – dijo llamando la atención de Naomi.- Es molesto que estés evitándome todo el tiempo sin dirigirme la palabra si quiera, corriendo por los pasillos cuando crees que no me doy cuenta de que estas ahí y sobre todo saltándote mis clases.

-Doflamingo… - comenzó a decir.- Él me dijo que yo no era más que una molestia para ti. No te he causado más que problemas y todo porque… - En ese momento Naomi se calló sin poder terminar la frase, por poco se le escapan esas dos palabras.

-¿Por qué…? – pregunto Trafalgar.

-No es nada – dijo Naomi levantándose.- Siento haberme saltado tus clases, Law y haber estado evitándote por esta tontería, aunque sigo pensando que muchas veces no te causo más que problemas…

-No tienes que preocuparte – dijo el moreno levantándose también.

-¿Cuánto tiempo he pasado durmiendo? – pregunto Naomi.

-Ya va a ser el recreo – contesto Trafalgar.

-Me voy al baño, nos vemos – se despidió Naomi.

En el baño se enjuago la cara para despejarse. Sin saber muy bien porque tenía ganas de llorar, tampoco sabía si era de alegría o frustración. Le encantaba hablar con Trafalgar, aunque solo fuesen tonterías, era algo que disfrutaba y no se había dado cuenta hasta esa semana que no había cruzado palabra con él. Pero en esa última conversación casi le confiesa que le gusta, algo que todavía es impensable para ella. ¿Cómo se lo tomaría él? Que una alumna se te declare debe ser muy incómodo. Es muy difícil adivinar en que piensa Trafalgar. Pero quizás ese toque de misterio es una de las cosas que más le gustan de él. Volvió a echarse agua en la cara para despejarse. Debe dejar de pensar en eso y disfrutar de los pocos ratos que pueda pasar con él. Aún quedan muchos planes por realizar.

Justo cuando salía del baño toco el timbre del recreo, otra vez tenía que ir junto a Doflamingo para su castigo.

-Maldito Doflamingo – rosmo dirigiéndose a su clase.

La puerta de la clase estaba abierta, algo inusual. Doflamingo siempre la dejaba cerrada.

Sin darle importancia dio unos pequeños golpes al marco de la puerta y entro en la clase. Dentro estaban Doflamingo, el cual la miraba ahora a ella y Trafalgar delante de él.

-Perdón, parece que molesto – dijo a punto de salir de la clase.

-Naomi, ven aquí – dijo Trfalgar, de espaldas a ella.

Algo insegura se acercó a los profesores.

-Se acabó el castigo que te puso Doflamingo – le anuncio Trafalgar sin apartar la mirada del otro profesor.

-Law, tú no eres quien puede decidir eso – dijo Doflamingo con cara de pocos amigos a la vez que cogía a Naomi por el brazo. – El castigo no ha terminado.

-El castigo ha terminado – repitió el moreno cogiendo a Naomi por el otro brazo.

-Law, ¿acaso quieres algo de Naomi? – insinuó Doflamingo con su desagradable sonrisa. - ¿Quieres castigarla?

Naomi se sentía muy incómodo en medio de todo aquello y también tenía ganas de cerrarle la boca a su profesor de latín.

-Quiero hablar con ella, esta última semana a estado faltando a todas mis clases y quiero saber porque – dijo Trafalgar.

-Si tanta curiosidad tienes yo fui quien le dijo a Naomi que se alejase de ti – dijo Dolfamingo entre risas.- Menuda cría, es como una marioneta.

La mano que rodeaba el brazo de Naomi comenzó a hacer presión. Trafalgar comenzaba a enfadarse.

Al comprobar que el moreno guardaba silencio con expresión seria, Doflamingo continuo con su charla:

-¿No te das cuenta de que esta chica te va a hacer la vida imposible? No es más que un saco de problemas, una molestia en sí. Empezando porque es tu alumna, Law. Deberías darme las gracias por quitártela de encima.

Algo dentro de Naomi exploto en ese momento. Estaba a punto de encararse a Doflamingo cuando Law la detuvo.

-Diciendo esto me demuestras que no solo eres un profesor insignificante, sino que tampoco es posible considerarte persona – dijo destrozando la sonrisa de Doflamingo y sorprendiendo a Naomi.

Sin decir nada más Trafalgar salio de la clase con Naomi, pero no sin antes detenerse en la puerta.

-Y Naomi ya no va a volver a ser tu criada.

-Podías haberme dejado decirle un par de cosas – dijo Naomi pasados unos minutos de su salida de la clase.

Trafalgar se detuvo y la miro con una sonrisa irónica.

-Si te hubiese dejado a ti habrías terminado pegándole por lo que podrían expulsarte, justo lo que Doflamingo quería – le explico. – Ya puedes irte con tus amigos y no te saltes más clases – añadió dándose la vuelta para irse.

Viendo como su profesor se alejaba por el pasillo decidió ir junto a sus amigos como le había dicho.

-¡Eso da mucho miedo! – exclamo Chopper.

-¿Qué es lo que da mucho miedo? – pregunto Naomi que acababa de llegar.

-Circula un rumor por el instituto de que una de las clases de la planta baja que se usan como almacén está encantada – le dijo Vivi.

- Y Luffy quiere ir, pero Chopper y Usopp tienen miedo – añadió Nami.

-¿Quiero ir a ver si hay fantasmas! –exclamo Luffy emocionado.

-Naomi, ¿tú no estabas castigada? – pregunto Usopp.

-Me levantaron el castigo – contesto sentándose con ellos.

El resto del recreo lo pasaron hablando. Había perdido bastante tiempo con Doflamingo pero hacia una semana que no disfrutaba de un buen recreo merecido. Cuando toco el timbre le explico a Shide lo sucedido de camino a clase. Tras varias risas y comentarios picaros decidieron volver al plan que habían pensado hacia una semana. El plan de los celos volvía a estar en marcha y parecía que todo estaba yendo a mejor.

Etiquetas: El Principio del Fin, Historias